El Mayo
Es una de nuestras tradiciones más antiguas, que a día de hoy se sigue celebrando cada 30 de abril. Al filo de las doce de la noche, los quintos traían hasta la plaza del pueblo el árbol más grande que habían conseguido cortar esa misma tarde y allí procedían a su simbólica plantada. Las quintas, que también acudían, pasaban la tarde y la noche acompañando a los muchachos que se afanaban en plantar el árbol lo más derecho. A continuación, los quintos y quintas lo celebran con una fiesta. Hoy día, perdura esa noche de fiesta en la Plaza Consistorial.